La reseña de Rogue Legacy

junio 5, 2022
En 2013 el primer Rogue Legacy se ganó los corazones de los fanáticos de los “rogue lite” con un a vuelta creativa y diferente en el género. Han pasado casi 10 años y Callar Door Games tenía ante sí el gran peso de la expectativa que conlleva crear una secuela. Pero todo parece que los desarrolladores hicieron a un lado las presiones y lograron crear una continuación que logra revitalizar la serie con ideas frescas. Además, todo esto ocurre mientras amplía lo que hizo que el original fuera una serie inmensamente agradable.
Hay cosas que no han cambiado. En esta secuela te puedes volver a poner en la piel de un héroe aleatorio encargado de navegar por los niveles de un castillo generado por procedimientos. El castillo es un agotador desafío repleto de enemigos que hay que derrotar, obstáculos que no son nada fácil de superar y oro que es importante robar. Cuando tu personaje elegido llegue al final de su barra de salud, te encontrarás en el calzado de su descendiente. Cualquier oro robado en su intento anterior ahora es tuyo para gastarlo en actualizaciones permanentes que te darán más oportunidades de pelear.
Al inicio de cada carrera existe la opción de elegir entre tres personajes de una variedad de clases que puedes desbloquear. Las clases tienen sus propias estadísticas, armas, talentos y habilidades pasivas únicas, lo que hace que cada una se sienta diferente de la anterior.
Además, una de las nuevas incorporaciones que, aunque parezca inusual, es divertida. Se trata de la clase Chef, en donde no solamente podrás cocinar un estofado para reponer tu salud, sino que el sartén puede infligir daños por quemaduras y desviar los proyectiles entrantes para crear un juego de ping pong mortal. Sin embargo, algunas clases son considerablemente más efectivas que otras.
Los “roguelites” por naturaleza tienen muchas repeticiones, pero Rogue Legacy 2 logra garantizar al jugador que nunca se sienta como una tortura. El sistema de actualización ofrece numerosas y variadas mejoras que agregan más que simples beneficios a sus estadísticas. Su oro ganado con tanto esfuerzo también se puede gastar para desbloquear nuevas clases, comerciantes y mejoras que alteran el juego, como el Arquitecto y un centro de adopción.
Lo más reciente de Cellar Door Game no se desvía de una fórmula ya establecida por el género pero logra atraerse por más. El juego es exigente e infinitamente entretenido impulsado por un sistema de progresión gratificante y que te logra absorber tanto como la primera vez. Mientras que las imágenes mejoradas, las opciones de personajes reforzadas y las deliciosas habilidades transversales crean una secuela que fácilmente supera a su predecesora.
Artículo escrito por Ana Hernández